Nuestra historia comienza como muchas otras historias de emprendedores.
La que está a la izquierda (o encima si nos ves desde el móvil) es Ángela. Siempre estuvo enamorada de las librerías/papelerías, además de tener inquietudes artísticas. Así pues, con su formación en fotografía, diseño gráfico, y mucha, muchísima ilusión junto al amor por los artículos de escritorio abrió el Rincón de Mommy, una papelería que además de vender bolis, libretas, papel y hacer fotocopias, enseguida se especializó en hacer todo tipo de producto personalizado.
Pronto comenzaron a entrar, no solo clientela particular, si no también empresas que demandaban material de oficina, tarjetas de visita, sobres, ropa laboral personalizada….
Viendo la buena acogida de los clientes nos especializamos en dar servicio a empresas, adaptando servicios y productos, combinando la presencia en internet y tienda on-line, con el trato directo, cercano y honesto que desde un principio fue esencia del Rincón de Mommy.